viernes, 21 de agosto de 2015

Finally lost.

En tu umbría ves como te consumes y, a pesar de ello, sigue siendo demasiado para lo poco que postulas. Y ni así consigues plantear detenerte.
El tribunal te sentencia como libre, por mucho que intentes a más no persistir condenarte a un fin sombrío, individualizado y confinado.
Ambiguamente te destierras a una libertad autodenegada y no pretendes mucho más que dejarte llevar y estomagar con el yerro del que solo tu imberbe persona padece por los restos.
Yerro que impones tú a tu persona, dado que tu conciencia yace hace ya lustros a ocho pies bajo tierra.
Llegado el colofón serás solo tú quien se martirice sabiendo e imponiéndose recordar aquel lóbrego que dejaste tras una crónica no correspondida.

miércoles, 1 de julio de 2015

Wasted.

Necesito que os situéis en esta actual, con una acidez insoportable que me recorre la vida, la cabeza pesada y confusa y una humareda de miedo que ojalá se me olvide si mañana me despierto.
Paso más tiempo alto que en tierra y los días pasan como hojas al viento pre-torrencial, y dadas las circunstancias ni siquiera hay momento de cohibirse.
Cada vez me es todo más extraño y lejano, y Staw-B aparece de a ratos ligeros. Finalmente creo que dejará de enviar amapolas diarias para exclusivamente presentarse en casa en días raros.

Me resulta increíble como el miedo a perderte y el amor que recibo por mi no-humano han conseguido eso que yo en años no.

Me da envidia vuestro poder respecto a mi, desearía con fuerza también tenerlo.

Espero de corazón que nada ocurra, pero si así fuera, os agradezco a los pocos que me habéis podido conocer por mi tosco y a veces sombrío adentro y no únicamente por el plástico externo con adornado casi excesivo.

A quienes me leen a veces y se acuerdan de que mi cabeza gira casi más que el universo en curso.

No me quiero,
os aprecio.

Double-dealing.

Prometió inquietudes que ni yo tenía, pintó un arte que apreciaba por no conocer o, en defecto, conocer demasiado y sin embargo, absorbiendo todo mi adentro, decidió un egoísmo y una autoaceptación gracias a terceros muy variados que desmoronó cada una de las intenciones que me hizo creer habidas. Y ni viéndome en los propios trozos de mi poca existencia le dio la importancia que requise entonces.
Creo que eso era lo que peor me adueñó y a la vez más daño hizo, la indiferencia que daba lugar.
Nos dábamos lugar.
A todo dábamos lugar. Eso hacía la amistad parcial y sutilmente cercana a perfecta, incluso estándome donde yo y estándose donde él. Y lo abandonó por un ego un tanto más lejano a aquello de sutil.

Rastrero, cruel, inoportuno, indeseado, lamentable, degradante, triste y abrumador lo provocado por su parte.
Vengativo, enfadado, rudo, maleducado, obsceno, deprimente, desgarrador y rozando lo vulgar por la mía.

Se acabó ese enriedo de la manera más tajante y dada a expirar esto posible, y aunque creo que me alegro por mi externo protegido, aún en el fondo me duele por el intra hecho añicos que queda en mí.

lunes, 4 de mayo de 2015

None.

Siento que me ahogo en un mar de ácido y restos aun reconocibles tras cada una de las fases y me niego a asumir que estoy dentro de un envoltorio plástico de un particular color festivo.
Que mi vida es un celofán de color inestable no es noticia, pero la insatisfacción actual, sí.

¿Que se hicieron las ganas?¿Los nervios?
Ni la vergüenza queda libre.
No soy nada. No soy nada en éste temporal.

Mi nudo en la garganta ya no es por timidez o miedo al rechazo, mi nudo en la garganta es por miedo a escucharme ser sincera conmigo misma...



 y quizá por eso lloro siempre y no sé nunca porqué.



También, quizás, simplemente sea el saber que cada segundo resta el tiempo que te voy a tener sonriendo en mi pecho,


                                           o, a lo mejor, simplemente, tengo miedo a amar.



¿Quién sabe? Qué se podrá esperar de una ignorante de la vida, una flor sin pétalos, una rosa sin espinas...

domingo, 22 de febrero de 2015

Sanity.

Perder la cabeza,
perdernos en nuestra.
Nosotros, perdernos,
huir en un pensamiento,
una nube,
el humo que consume,
que consume nuestro ser,
pensar, sentir, vida.

Perdimos la cordura,
perdimos.
Perdimos la cordura
y sin embargo,
nos encontramos
en ese mundo
sin leyes,
utópico,
de quien no razona...

Nunca nos encontrarán;
no se encuentra
a quien no está
y nosotros,
nosotros estamos
a dieciocho mil años luz 
ya.

lunes, 19 de enero de 2015

Plunge.

Me prometí nunca escribir mientras estuviera feliz, pero me rompes los esquemas de nuevo.

No puedo evitar querer plasmar que me muero de ganas de volver a verte incluso antes de haber cerrado la puerta al decirnos «Adiós, hasta mañana.», que puedes conmigo, que me puedes. Que se me sale el corazón del pecho cada vez que te veo, que tus abrazos son mi mar, y que mimarte es mi deseo más intenso... 

Que eres mi miedo, horror, fobia.
-A perderte, alejarte, me olvides-.
Y que asusta océanos pensarte así, escribirte, a estas alturas, de este modo. 

¿Quién lo diría? el «Cada día un poco más» después de 365 sigue.


Sigues. Seguimos.

-Y quiero que sigas y sigamos.-


Y sí, ojalá nunca te vayas. Ojalá nunca me arrebates esta sensación de utopía cuando estamos juntos. Cuando somos nosotros y no tú y yo.


Gracias destino por reacomodarme la existencia, por no despegarme de el poco sentido que hoy, ahora, me sumerge en una fosa de desesperación agónica de amor.